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Los kioscos de autoservicio tienen múltiples aplicaciones en diferentes tipos de negocios. Pueden utilizarse para proporcionar información a los clientes a través de videos interactivos, gestionar turnos y asignar mesas mediante software específico, o permitir a los clientes hacer pedidos y pagar directamente en el terminal, obteniendo un ticket como comprobante. Además, sirven para mostrar información detallada de productos y otras funcionalidades.
La versatilidad de los kioscos de autoservicio permiten su uso en una amplia variedad de negocios, desde restaurantes y tiendas minoristas hasta entidades públicas y privadas. Cada vez más empresas optan por incorporar monitores táctiles interactivos como una solución moderna y atractiva que mejora la experiencia del cliente. En España, cada año más negocios se suman a esta tendencia debido a los múltiples beneficios que ofrecen, tanto para el empresario como para el cliente final.
